La medicina venezolana en terapia intensiva: fuga de talentos y escasez permanente.

Por Belén Marty: Publicado el 29/8/14 en: http://es.panampost.com/belen-marty/2014/08/29/la-medicina-venezolana-en-terapia-intensiva-fuga-de-talentos-y-escasez-permanente/

 

A Gustavo Villasmil tuve la dicha de conocerlo en un seminario que ambos cursamos en Alemania hace un año. Multifacético, es médico cirujano, militante por las causas de la libertad y secretario de Salud del Estado de Miranda en Venezuela, el distrito que conduce el opositor Henrique Capriles Radonsky.

Gustavo Villasmil, médico cirujano de Venezolano.

Recuerdo de entonces a un hombre muy observador de mirada profunda, y algo nostálgica, quizás de su pasado como estudiante de la Universidad Central de Venezuela (UCV), una de las universidades más prestigiosas. Su personalidad contenía una mezcla de picardía, humor caribeño y una pizca de curiosidad que la llenaba con preguntas sobre Argentina, mi país.

De manera razonable, presumo, consideré que era mi tiempo de conversar con él sobre la frágil situación del sistema de salud venezolano, dado que GV, como le gusta firmar todos sus correos, ha trabajando previamente en las trincheras de la salud pública: Fue el jefe del Servicio de Urgencias del Hospital Vargas de Caracas desde 1999 hasta octubre de 2004.

El mundo ha reportado sobre harto desabastecimiento que afecta a Venezuela, desde productos de higiene como el papel higiénico, hasta pasta dental o ingredientes tan básicos como el aceite, la harina, la leche o el pollo.

Con las medicinas sucede igual. Asegura que lo que está pasando en el país  “no pasa ni siquiera en África”.

“En Caracas, es más probable que un vendedor de calle a las puertas de un hospital expenda, por ejemplo, la Vancomicina (un tipo de antibióticos), que no se encuentra en establecimientos de farmacia ni en droguerías. Ahora mismo faltan medicamentos elementales (antihipertensivos, etc)”.

Según él, la clave para muchos pacientes es esperar a que algún pariente que viva en el extranjero les envíe una dotación del medicamento que necesitan a través de algún pasajero o tripulación de cabina. “Así estamos…”, lamenta.

“La escasez de medicinas es una de las expresiones más claras del ‘Estado fallido’ en que nos hemos convertido en materia sanitaria”, dice. Se encuentra a más de 4.600 kilómetros de distancia, pero puedo imaginármelo mirando hacia arriba y levantando los hombros en clara señal de indiferencia.

“El Estado debe darnos garantías mínimas de seguridad y orden. La provisión de un marco regulatorio en lo que concierne al medicamento es una función estatal indeclinable. Nos inundan de productos cubanos, chinos o pakistaníes que apenas exhiben una etiqueta, sin licencia ni registro sanitario”, precisa.

Villasmil se lamenta en plena desesperación: “No hay modo de importar suministros críticos —catéteres y stents para enfermedades coronarias, drogas para el tratamiento del cáncer, entre otras cosas—, porque no es posible pagar por ellos en el mercado internacional”.

Parte de lo que me pregunto sobre su quehacer médico, es si ha mermado la posibilidad de que los profesionales de la salud se mantengan actualizados en sus respectivas áreas, y puedan viajar al exterior con frecuencia. Villasmil confirma que actualmente es casi imposible viajar desde o hacia Venezuela, para asistir a congresos, cursos, o eventos académicos. “Todo eso solía ser parte de nuestra rutina”.

Le atribuye al control cambiario las causas de esa imposibilidad. “No somos dueños de nuestro dinero —que cada vez vale menos— ni podemos hacer lo que nos plazca con él, sea asistir a un congreso médico o algo tan simple como comprar un libro que nos interese por Amazon”.

“Segundo, estamos aislados. Las líneas aéreas internacionales han reducido su oferta de asientos desde Caracas en más de un 70%. La razón: no pueden repatriar sus ganancias. Si yo pago un billete en bolívares a una línea aérea europea, ésta no puede obtener el equivalente de ese importe en euros, como sería lo normal.

Esto ocurre porque el Estado venezolano no puede respaldar en divisas los bolívares que tiene en circulación, que en un 70% no es sino dinero inorgánico. De modo que ni Alitalia, Air Europa, Lufthansa, Air Canada, American Airlines, Avianca, etcétera…todos dejaron de volar a Caracas ¡Ni Aerolíneas Argentinas quiere venir!”, menciona con sorpresa.

En el fondo, está la política

La realidad venezolana parece letra de algún tango, solía decirme.

“La situación ha empeorado con el ascenso de Maduro al poder. La razón: Chávez desmanteló la economía en diciembre de 2012 en un esfuerzo para ganarle a Capriles. No menos de US$12 mil millones se ‘quemaron’ en la pira electoral de las elecciones de ese año y de 2013.

De manera que Maduro heredó una economía exhausta, fundidas las reservas internacionales, sin crédito externo y con un ‘default’ a la vista. El chavismo logró la hazaña de quebrar una economía que en 15 años ingresó US$1 millón de millones por concepto de factura petrolera. ¡Ni un genio lo habría hecho mejor!”

Una de las cosas que me pregunto es cuánto del personal médico abandonó, y se calcula que abandone, a Venezuela. Me asegura que no menos de 10.000 médicos, e igual número de enfermeras de alta especialización que se han marchado a muchos países.

“Siendo jóvenes, muy bien entrenados y dominando idiomas, las oportunidades que brinda el mercado global les llueven. Este año, el 60% de una clase de graduados en Medicina, sólo en la Universidad Central de Venezuela, se estará marchando del país”.

Precisamente, lo que más le preocupa es la descapitalización que en términos humanos está sufriendo su país, como ya le sucedió a Argentina y a Cuba.

“Perón destruyó a la universidad argentina, que en su día llegó a producir un premio Nobel en Medicina, el gran Bernardo Houssay. Los Castro destruyeron a la universidad cubana, en cuya principal facultad médica —la de la Universidad de La Habana— se formó Agustín Castellanos, uno de los más grandes cardiólogos de todos los tiempos. Si vas a un hospital del sur de la Florida, verás sus directorios profesionales llenos de nombres hispanos, cubanos para más señas, expresión del valioso capital humano que abandonó la isla para aquerenciarse en un medio que le supo recibir y apreciar”.

A propósito de la mención, decidí ahondar en su opinión sobre los polémicos médicos cubanos que trabajan Venezuela, y sobre su presunta excelencia académica, parte insoslayable del gran mito cubano, que para él, se derrumba con un soplo.

“He tenido muy malas experiencias con los médicos cubanos que ejercen aquí. Están muy mal entrenados, no manejan el estado del arte en la materia médica y tienen dificultades mayores en el empleo de ciertas tecnologías que nunca antes vieron.

Hace años solía enfurecerme con ellos, pero he llegado a entender que son rehenes del régimen que los trajo hasta aquí. Es un drama humano complejo…

En absoluto me tomo en serio las ofertas de intervenciones y tratamientos ‘milagrosos’ que suelen hacer los propagandistas cubanos. Nadie en la comunidad médica mundial les toma en serio, y con razón. Estafas como el famoso PPG —un supuesto hipocolesteromiante—, o la del tratamiento del vitiligo, son sólo dos de las numerosas engañifas médicas que los cubanos han vendido aquí”, relata sobre su experiencia.

A la luz de la tragedia de muchos enfermos que necesitan tratamientos inexistentes en el país, le pregunté si la situación dista mucho de la realidad de militares y altos burócratas, que gozan de la cobertura en las clínicas privadas.

En esta sintonía, dice Villasmil: “Si un ciudadano ‘de a pie’ quisiera disponer de una cobertura similar, simplemente no podría pagarla. Se cumple así lo que bien dijo el gran George Orwell: todos somos iguales, solo que unos somos más iguales que otros”.

Antes de despedirnos y prometernos respectivas visitas, suspira: “¿Qué otra cosa se puede esperar de un régimen forajido?”

 

Belén Marty es Lic. en Comunicación por la Universidad Austral. Actualmente cursa el Master en Economía y Ciencias Políticas en ESEADE. Conduce el programa radial “Los Violinistas del Titanic”, por Radio Palermo, 94,7 FM.

LA IMPORTANCIA DEL SENTIDO DEL HUMOR

Por Alberto Benegas Lynch (h)

 

No es muy fácil escribir sobre el tema de esta nota dadas las trifulcas y turbulencias del momento algunas sobre las cuales también hemos escrito, pero de todos modos puede ser saludable un ejercicio de concentración y prestar un instante de atención a este asunto que abre un paréntesis a las preocupaciones cotidianas.

 

Debemos tener muy presente que nos encontramos ubicados en un universo en el que existen millones de galaxias con altísimas probabilidades de vida inteligente en otros mundos y concientes de nuestra inmensa ignorancia de casi todo. Estas son poderosas razones para no tomarnos demasiado en serio y andar con pies de plomo.

 

El sentido del humor es esencialísimo para la vida, no solo por lo dicho sino por respeto a uno mismo que demanda la debida humildad y también por razones de salud ya que reduce el nivel de hormonas vinculadas al stress, mejora la digestión, aumenta el volumen respiratorio, mejora la circulación de la sangre y potencia los factores inmunológicos. Pero el motivo central es que mejora la calidad de vida con alegría y contrarresta los problemas que a todos les circundan.

 

Se dice que hay dos puntos clave para evitar el stress: primero no preocuparse por nimiedades y segundo, tener en la mira que, bien visto, todo es una nimiedad. Esto está bien como chiste pero el sentido del humor no significa para nada frivolidad, es decir aquel que se toma todo con superficialidad y descarta y desestima los temas graves. Es un irresponsable que resulta incómodo para encarar temas que por su naturaleza requieren análisis prudentes y atentos. Tampoco el sentido del humor alude a lo hiriente y agresivo, ni las referencias a temas que no son susceptibles de risa.

 

Es de interés el experimento de contar en reuniones sociales las estupideces que uno hace, no solo para liberar tensiones sino para observar la reacción de los demás que en general son de dos tipos. Unos se manifiestan sorprendidos en el sentido de que como puede ser que se comentan determinados errores garrafales. Son los amargos de la reunión, los que miran desde arriba los acontecimientos como si ellos fueran incapaces de una equivocación. Es bueno tenerlos en cuenta para no mantener una conversación seria con ellos. Los hay también que se ríen a sus anchas del tropiezo y relatan acontecimientos similares que les han sucedido a ellos. Con estos puede conjeturarse una conversación fértil.

 

En cuanto a la humildad de la que, como queda dicho, el humor es una manifestación (y muy especialmente bienhechora si incluye la capacidad de reírse de uno mismo), lo cual no debe ser confundido con la falsa humildad que oculta una gran soberbia. “La humildad, siempre que no sea ostentosa” ha sentenciado bien Borges.

 

Cultivar el sentido del humor no significa que se sea alegremente optimista, más aun el pesimista del presente es en verdad un optimista del futuro porque ve posibilidades de mejorar en un contexto en el que atribuye potencialidades de excelencia para lograr metas. El optimista del presente, en cambio, es un pesimista del futuro porque estima que no es posible mejorar y, por ende, se conforma con lo que sucede. Se puede ser realista y al mismo tiempo tener muy buen sentido del humor.

 

Platón sostenía en La República que “los guardianes del Estado” debían controlar que la gente no se ría puesto que eso derivaría en desorden (lo mismo sostuvo Calvino). De esta tradición proceden las prohibiciones de mofas a los gobernantes autoritarios en funciones. Nada más contundente para gobernantes que se burlen de ellos, por ejemplo, en nuestra época probablemente lo más filoso haya sido la producción cinematográfica El gran dictador de Charles Chaplin para ridiculizar a la bestia de Hitler. Y más recientemente, los chistes en torno a los discursos de Nicolás Maduro con respecto a “la multiplicación de los penes” o a “los millones y millonas”, Cristina Kirchner que habla de “oficiales y oficialas” o, en pleno mundial,  destacó que los equipos de football  tienen “once jugadores y un arquero” y en sendas conferencias de prensa, primero en Oregon y luego en Jordania, Obama manifestó que “he visitado 57 estados de mi país, creo que me falta uno” y “quiero ser absolutamente claro, Israel tiene estrechos lazos de amistad con Israel”. Estos tropiezos -unos más grotescos que otros- ocurren desde tiempo inmemorial, más graves aun si recordamos que había que tomar seriamente el justificativo de los incestos de Calígula “para preservar la pureza de la sangre”. El ridículo es lo que más afecta a los megalómanos porque consideran que están más allá “del llano” y del error; cuando son sorprendidos con “las manos en la masa” robando dineros públicos, se disgustan, cuando son descubiertos en otros delitos, se quejan y buscan subterfugios, pero cuando los ponen en ridículo estallan en rabietas que no pueden absorber ni digerir. Los gobernantes suelen adoptar actitudes de estar haciendo cosas sublimes pero lo que no tienen en cuenta es que “entre lo sublime y lo ridículo hay solo un paso”.

 

Muchos han sido los estudios detallados sobre aspectos filosóficos del humor, comenzando por Henri Bergson, pero es relevante subrayar que, de lo conocido, es una característica solo humana puesto que requiere comprensión de lo dicho. La hiena no tiene humor, no se ríe -hace ruidos que se asemejan a la risa- del mismo modo que puede hacerlo un ser humano cuando le hacen cosquillas donde solo existen fenómenos musculares y nerviosos. Por otra parte, no necesariamente se sigue la risa del humor, sin embargo, a la inversa, cada vez que hay risa está presente el humor.

 

En otro orden de cosas, como parte de la educación familiar, no es pertinente reírse delante de los hijos de temas que tienen gracia pero están cargados de contravalores ya que la educación, precisamente consiste en la trasmisión de valores. Asimismo, chanzas que intercalan lenguaje soez, contribuyen al deterioro de valores básicos. No es que los que se abstienen de recurrir a improperios y equivalentes carezcan de imaginación, sino que no lo hacen para evitar que todo se convierta en una cloaca.

 

El sentido del humor entonces refleja un aspecto sustancial de la personalidad, en realidad, por las razones apuntadas, se hace muy difícil que transcurra la vida sin el valiosísimo ingrediente del humor  y, además, de muchos chistes contestatarios al status quo surgen ideas novedosas y de gran utilidad para sustituir lo vigente por otras perspectivas de gran calado. En no pocas ocasiones la fina ironía ha permitido poner al descubierto grandes verdades. En otros casos, la comedia ha desentrañado aspectos ocultos que era necesario develar.

 

Pocas cosas son más cómicas -tragicómicas- que observar funcionarios gubernamentales con rostros adustos y gestos graves portando gráficos (generalmente mentirosos), pontificando acerca de cómo debe el aparato estatal administrar los bolsillos ajenos, siempre con resultados calamitosos pero adjudicando las culpas a “la especulación”, a “golpes de mercado” y otras gansadas que, según ellos, oscurecen el panorama a pesar de la supuesta sapiencia de los burócratas.

 

De todos modos, somos mortales y la vida es corta y hay que contribuir en lo que se pueda para mejorarla en cuanto expandir los espacios de libertad para que cada uno se encamine hacia su proyecto. Respecto al final de los días, Woody Allen en un arranque de humor negro escribió: “Me gustaría morir como mi padre que se quedó dormido y no como los otros que iban gritando en el automóvil”.

 

En lo que fue la primera vez que dictaba clase en la universidad, después de desarrollar una tesis del autor que mencionaba a continuación, quise decir que la elucubración pertenecía a “Hans Sennholz, que es un alemán…” pero dije “Hans Sennholz, que es un animal…”, con lo que quedé un tanto estupefacto, estado que inmediatamente se intensificó a raíz de las sonoras carcajadas de mis incipientes alumnos.

 

Cierro este apunte sobre el humor con cuatro chistes (y no tan chistes) de economistas y uno de política:

“La economía es el único ejemplo en el que pueden obtenerse premios Nobel por decir cosas opuestas entre si” (y a veces en el mismo acto, como fue el caso de Hayek y Myrdal).

“Un economista es quien se hace rico explicando porqué otros son pobres”.

“¿Porqué Dios creó a los economistas? Porque de esa manera los pronosticadores de meteorología no quedan tan mal parados”.

“¿Qué tienen que hacer esos hombres con trajes grises en este desfile militar? Son economistas, no saben el daño de que son capaces”.

“Los políticos en funciones son como los pañales, tienen que cambiarse y por los mismos motivos”.

 

Alberto Benegas Lynch (h) es Dr. en Economía y Dr. En Administración. Académico de la Academia Nacional de Ciencias Económicas y fue profesor y primer Rector de ESEADE.

Intelectuales españoles en «La Prensa», de Buenos Aires

Por Enrique Edmundo Aguilar. Publicado el 5/6/13 en http://www.elimparcial.es/america/intelectuales-espanoles-en-ila-prensai-de-buenos-aires-123982.html

 La Fundación Ortega y Gasset Argentina publicó a fines del año pasado, con el apoyo del Fondo Nacional de las Artes y sello de Bergerac Ediciones, el libro Españoles en el diario La Prensa. Pérez de Ayala, Jiménez de Asúa, Azorín y Maeztu. Se trata de una obra colectiva, coordinada por Ángeles Castro Montero, quien es además autora del prólogo y del capítulo dedicado a Ramiro de Maeztu. Asimismo, participan en la obra Mercedes Monteiro Martins, Luciana Carreño y Verónica Zumárraga, responsables respectivamente de los capítulos sobre Ramón Pérez de Ayala, Luis Jiménez de Asúa y Azorín.

Con destacable solvencia, las autoras debieron sortear el enorme inconveniente que suponía la recopilación de un vasto material no siempre en buen estado para luego digitalizarlo y ordenarlo de acuerdo con modernos criterios de catalogación. En este sentido, la obra constituye de suyo un valioso precedente para futuras investigaciones y hasta una guía de trabajo que seguramente servirá de orientación a la hora de rescatar la presencia en la prensa gráfica argentina de numerosos periodistas, filósofos, literatos y hombres de ciencia españoles durante las primeras décadas del siglo XX.

Castro Montero se centra en las corresponsalías londinenses de Maeztu (residente entre 1905 y 1920) y, en particular, en sus agudas reflexiones sobre el lujo, la disponibilidad del tiempo libre y el espectáculo del consumo en los distintos sectores de la sociedad británica. Monteiro Martins recupera las impresiones de Pérez de Ayala sobre el impacto de la Primera Guerra Mundial en los Estados Unidos y sobre las características de la tradición democrática estadounidense, con motivo de su estancia como becario de la Junta para la Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas. Carreño, por su parte, indaga en las ideas de Jiménez de Asúa, que se desempeñó como colaborador de La Prensa a partir de 1924, destacando cómo su posición frente a la dictadura de Primo de Rivera “le aportó un perfil crítico y a la vez progresista a su propuesta hispanoamericanista”. Finalmente, Zumárraga analiza la gran cantidad de cuentos breves que Azorín envió al matutino argentino entre 1936 y 1939 cuando, exiliado en Paris y sin recursos bibliográficos, debió dedicarse a la ficción literaria pero sin perder nunca de vista el horror de la guerra civil, “sutilmente aludida o elípticamente abordada” en esos cuentos.

Resaltar de este libro su excelente factura y la calidad de las investigaciones presentadas sobre un campo de estudio tan poco explorado como es el de las colaboraciones de intelectuales españoles en la prensa argentina, es expresar un elogio a medias. Estimo que el lector, familiarizado o no con el tema, encontrará fácilmente otros tantos motivos para completarlo.

Enrique Edmundo Aguilar es Doctor en Ciencias Políticas. Decano de la Facultad de Ciencias Sociales, Políticas y de la Comunicación de la UCA y Director, en esta misma casa de estudios, del Doctorado en Ciencias Políticas. Profesor titular de teoría política en UCA, UCEMA, Universidad Austral y FLACSO,  es profesor de ESEADE y miembro del consejo editorial y de referato de su revista RIIM.

 

Clarín miente, Cristina dignifica:

Por Gabriela Pousa: Publicado el 16/4/12 en http://www.economiaparatodos.com.ar/ver_nota.php?nota=3439

En la Argentina impera hoy un “capitalismo de compadreo”: de lo que se trata es de ver quién es más influyente y quién está más cerca de la cabeza del poder del momento.

Si partimos de un hecho fáctico como lo es hoy tener al vicepresidente Amado Boudou ocupando la Presidencia pre tempore de la Argentina, todo cuanto se pueda agregar luego no aporta mucho al grotesco que venimos presenciando.

La sociedad, dividida hasta el hartazgo y enfrentada a sí misma en estos últimos años, también halla una escisión en sus opiniones o comentarios respecto al escenario, y a la actuación de actores primarios y secundarios. Por un lado, se verá a los “escandalizados”; por otro, a los desorientados que están más preocupados en cómo funcionan los trenes o dónde conseguir yerba para el mate cocido que obra cual cena. Los primeros, todavía se pellizcan para saber si es verdad lo que nos está pasando, o si acaso están soñando. No es precisamente un grupo de pertenencia, aunque en ocasiones surgen voces redentoras como sucedió la otra noche al regresar Elisa Carrió a la televisión y, como se dice ahora, “prender el ventilador”.

Qué paradoja: la candidata menos votada y hasta castigada en las urnas resulta ser, de golpe, la vocera de una sociedad, o de una parte de ella, enmudecida ante la ignominia. No hay duda de que somos unos ciudadanos muy extraños.

Carrió habló de una pelea entre mafias. Cuando de eso se trata no hay forma de sacar bandera blanca, hay que dejarlos y que entre ellos se vayan bajando. Sucede como en las parejas: los de afuera son de palo. Sin embargo, abren fuego, y las balas también llegan al pueblo. Un pueblo que acepta, pero que entiende poco y nada de esta trama novelesca.

En cualquier otro país, apenas asomada una sospecha como la que merodea a la vicepresidencia, la renuncia sería la respuesta. Mismo, si hacemos un parangón con el fútbol, se verá de qué modo, cuando un DT no cumple con los objetivos esperados, deja el cargo. Si en el marco deportivo pasa eso, ¿qué debería pasar en lo político? Si una Presidenta (directora técnica) no alcanza la meta, debería dar un paso al costado o bien, convocar a expertos en la materia para que asesoren sobre cuál es la mejor manera de acercarse a ella.

Demasiada ingenuidad en esta Argentina. Acá, frente al error, más se atornillan en las sillas. Pensar en una renuncia de Boudou, por ejemplo, es pura utopía.

Los temas de la semana han sido principalmente: el caso Ciccone que involucra a funcionarios, vecinos, amigos que no son, amigos que sí son, y todas esas relaciones “casuales” que suelen darse, por ejemplo, en películas como las de Woody Allen.

El caso YPF (con la cual hasta ahora, no hay caso) y de nuevo los amigos que fueron y ya no son, y la lista interminable de dinero esfumado en la noche de los tiempos, amén de una situación energética que hace mella… Hoy, los Kirchner y los Esquenazi están más cerca de parecerse a los Corleone y los Gotti que a los Montescos y Capuletos a juzgar por los métodos. Sin embargo, hay que rescatar que hasta las grandes mafias de la historia universal, han tenidos sus códigos. Hoy vale todo.

Ciertamente nadie sale perdiendo de la contienda. A la Presidente le fue muy bien cuando se privatizó YPF, le fue muy bien cuando pasó a manos del grupo mencionado, y le irá muy bien si vuelve al Estado. A quienes no les irá de igual forma será como siempre, a los ciudadanos. ¿Pero desde cuándo importan los ciudadanos?

Para el final, se le dejó también un par de horas a Hugo Moyano: había que frenarlo. El camión aceleraba cada vez más, y delante estaba la Rosada… Algo se logró: la CGT hoy está prácticamente repartida entre las huestes de Caló (léase quienes irían, en lo sucesivo, a aplaudir a Cristina), y los muchachos moyanistas. En este aspecto, la pelea recién comienza y aventurarse es hacer prestidigitación más que análisis.

Recordemos, a su vez, que en medio de todo esto están las Malvinas, que si tuvieron que ser “desempolvadas” para cubrir “pesares” que Magnetto “inventa” aburrido de no hacer nada, no se las puede borrar del mapa en un instante. El problema es que las Malvinas sólo incumben a naciones que se vieron afectadas en la guerra y ya se habló de ellas, mientras que, el resto de los países, sigue mirando más lejos. Veinte años no será nada, pero treinta para manipular políticamente a las masas son cifras descaradas.

Y así volvió la mandataria con la cabeza gacha pero con la foto que ilustra la “amistad” con Obama. Habría que comentarle al Presidente de los Estados Unidos cómo tratan acá a los “amigos”…

Para graficar la situación, Cristina quiso ser reina pero Gran Bretaña le ganó. Tal vez desconsolada por ello buscó una alternativa que la saciara y pensé en ser “virreinata”: ¡Vamos, pues, por la Madre Patria! Pero, la progenitora puso freno, prohibió la “previa”, la fiesta y el cachondeo. ¿Y ahora qué hacemos?

Ya sabemos que la jefe de Estado no recula, buscará tal vez un intermedio en sus aspiraciones de ser también “petrolera” en estas tierras. Muchos ya nos imaginábamos al “perforador” de Cristina saliendo en video conferencia para narrar las bondades de los yacimientos, y luego descubriendo que era un militante de La Cámpora” con visos de histrionismo…

No figura en la agenda presidencial, jugarretas del olvido, pero simultáneamente, hubo destrozos por temporales. Sucedieron con más énfasis en la zona oeste y sur del conurbano bonaerense, ende en Balcarce 50 se miraron entre ellos,y con una mueca parecida a una sonrisa socarrona “lamentaron” que sea Daniel Scioli el que deba hacerse cargo de la cosa. Sí, son todos kirchneristas, o peronistas, o cristinistas, pero esta visto que para el caso a todos les cabe el sayo.

La semana que se inicia tendremos un “revival” de todo esto, cómo cuando en una casa sobra un poco del almuerzo, otro poco de la merienda y algo de la cena. Un salpicón muy oportuno para que de todo ello, entendamos aún menos.

No es fácil separar a los malos de los buenos. Días atrás hablé de un “capitalismo de testaferros”, hoy creo que ha mutado y pasado a ser un “capitalismo de compadreo”: pues de lo que se trata es de ver quién es más influyente, y quién más cercano al hombre de poder del momento. Abuso del “lobbying” o “intercambio de favores” entre un particular y un político influyente.

El dinero no va con el mérito, sino con el poder y el deseo. Se ha abandonado hace rato la simple lógica empresarial para entrar en una relación de carácter feudal. Es por eso que hoy más nunca vemos cumplido el Axioma de Sade, según el cual ser rico no consiste en disfrutar la saciedad de los propios gustos y necesidades, sino gozar que el otro no pueda hacerlo. No es tanto acumular para uno mismo, sino sustraerle al resto.

¿Qué agregar? ¿Que Boudou sacó a Esteban Righi? ¿Que las expensas y el cable las pagó Vanderbroelen? ¿Que van por el juez Rafecas? Todas obviedades y, aparte, entre los nombrados no hay ningún santo. Sin embargo, quien está en el centro de este tornado 2012 (100% confirmado) es ni más ni menos que la Presidente. Sola con su genio y con su suerte. Qué hará es un misterio característico del juego del kirchnerismo.

Si los diarios adelantan que hablará de YPF, o que echará a Amado, demos por seguro que de esos episodios no sucederá ninguno. Nada peor para el “estilo K” que darles la razón a los medios. Recordemos que en esta Argentina, Clarín miente y Cristina dignifica.

Gabriela Pousa es Licenciada en Comunicación Social y Periodismo por la Universidad del Salvador (Buenos Aires) y Máster en Economía y Ciencias Politicas por ESEADE. Es investigadora asociada a la Fundación Atlas, miembro del Centro Alexis de Tocqueville y del Foro Latinoamericano de Intelectuales.

 

BECAS COMUNIDAD ESEADE – Licenciaturas y Maestrías

Se comunica la apertura para la postulación a las BECAS COMUNIDAD ESEADE. Dichas becas, cubren el 50% de los aranceles (no así la matrícula) de los programas de Maestría y de Licenciatura de ESEADE. Han sido establecidas con el objetivo de fortalecer los lazos entre la Institución y sus integrantes.

Las becas están destinadas a candidatos de cualquiera de estos cursos que sean recomendados académica y personalmente por un profesor, directivo académico, miembro del Consejo Directivo o funcionarios de la Institución (familiares no están excluidos). Los interesados deberán presentar (hasta el 27 de marzo) para postular a la Beca, sus antecedentes y una carta de referencia de un miembro de la Comunidad ESEADE. No podrán presentarse a la Beca candidatos que ya han iniciado el proceso de matriculación en ESEADE.

Para mayor información dirigirse a María Eugenia Fernández Crisial a eugeniaf@eseade.edu.ar o al 4773-5825.

Manuel Ayau: In Memoriam.

Palabras pronunciadas por el Prof. Dr. Guillermo Luis Covernton, con motivo de la inauguración del Tercer Congreso Internacional “La Escuela Austríaca en el siglo XXI”, organizado por: Fundación Bases; Instituto Hayek; Facultad de Cs. Económicas del Rosario (UCA) Rosario, Argentina 5, 6 y 7 de Agosto de 2010

Estimados Amigos:

El pasado Martes 3 de agosto, es decir apenas dos días atrás, quienes creemos en la sana economía, en el estudio sistemático y en la importancia de la educación económica para impulsar el bienestar y el desarrollo de las personas hemos tenido que lamentar el fallecimiento del Dr. Manuel Ayau Cordón:

Industrial guatemalteco, ingeniero mecánico, doctor honoris causa en letras humanistas por el Hillsdale College, y doctor honoris causa en Derecho por Northwood University, fue Rector fundador de la Universidad Francisco Marroquin. También se desempeñó como presidente de la Bolsa de Valores de Guatemala y de la Sociedad Mont Pèlerin. Fué miembro del Consejo Consultivo del Centro de Estudios Económico Sociales de Guatemala. Fiduciario de la Foundation for Economic Education de Nueva York. Y miembro de la Junta Directiva de Liberty Fund, Inc., Indianapolis.

Varios de quienes asistimos a este congreso tuvimos el privilegio de conocerlo, a fines del siglo pasado, con motivo del inicio de un programa de perfeccionamiento docente que propuso para su querida Universidad. Con ese motivo fuimos invitados, junto a un grupo de catedráticos argentinos entre quienes se contaban los Dres. Juan Carlos Cachanosky, Martín Krause, Gabriel Zanotti y yo mismo.

Nuestra tarea docente en la Universidad que él había contribuido a fundar y en donde dictó cátedra por años, nos permitió disfrutar, casi cotidianamente, y durante nuestras estadías en su país, que se extendieron a lo largo de los siguientes años, de su afabilidad, su sencillez, su don de gentes y su genuino interés por ayudar a la difusión de las ideas de la libertad, del respeto por el disenso, y del conocimiento económico serio y metódico que aspiraba para todos los ciudadanos de su querida patria.

Querido Muso: Gracias por todo lo que nos diste y gracias a Dios por permitirte acompañarnos estos 3 días, porque estoy seguro que tu alma estará compartiendo con nosotros este congreso que ahora se inicia.

Les propongo un minuto de silencio en su memoria.

Gracias.

Guillermo Luis Covernton es Dr. En Economía, (ESEADE). Es profesor de Macroeconomía y de Finanzas Públicas en la Pontificia Universidad Católica Argentina, Santa María de los Buenos Aires, (UCA).