Por Emilio Cárdenas. Publicado el 16/5/12 en: http://www.cronista.com/contenidos/2012/05/16/noticia_0056.html
Las recientes elecciones parlamentarias en Argelia, como se esperaba, parecerían haber frustrado las esperanzas de aquellos que, pese a todo, anticipaban una buena elección para el islamismo local. No fue así. Para nada. Más bien sucedió todo lo contrario.
En rigor, el partido de gobierno acrecentó su caudal de votos, a costa de los de una endeble alianza de partidos islámicos moderados. Obtuvo el 62% de los sufragios totales, liderando una coalición en alianza con el Partido Agrupación Nacional Democrática.
En cambio, el islamismo, convocado por el brazo político de la Hermandad Musulmana local, logró apenas un 12% de los sufragios. Un resultado por cierto muy diferente del abortado triunfo islámico de 1991, que en su momento, al ser desconocido por el oficialismo y las fuerzas armadas, desembocara en una cruenta guerra civil.
En este caso, el muy particular de Argelia (a diferencia de lo ocurrido en algunos de sus países vecinos) el aumento de la presencia del islamismo, no ha sido el resultado de la primavera árabe, según queda visto.
El Frente para la Liberación Nacional, el partido oficialista, se quedó con prácticamente la mitad de las bancas parlamentarias. Pese a las vociferantes acusaciones de fraude, la misión de observadores de la Unión Europea (la primera que se desempeña en Argelia) produjo un informe sin mayores críticas, asegurando que los comicios se desarrollaron con la más absoluta normalidad.
De esta manera la administración del Frente de Liberación Nacional, encabezada desde 1999 por el ya anciano líder Abdelaziz Bouteflika -que enfrentara algunas protestas en el 2011 y las silenciara con dádivas y subsidios generados por la riqueza petrolera del país- parecería haberse afirmado. Ese partido, recordemos, ha tenido firmemente en sus manos el timón político de Argelia -constantemente- desde que la nación mediterránea lograra su independencia de la metrópoli colonial, en este caso: Francia.
La concurrencia fue, como siempre, bastante baja. Apenas del 42,9% de los posibles votantes. Lo que supera ampliamente, sin embargo, la poca concurrencia de 2007, que fuera del 35,7%. La apatía general hacia la política es bastante visible, lo que generalmente se atribuye al profundo ambiente de discrecionalidad que genera un larguísimo régimen autoritario, en el que los cambios de mando se negocian y deciden con la participación activa de la cúpula militar.
Para Bouteflika, que hoy tiene 75 años y que, según se espera, habrá de retirarse de la política activa en el 2014, aparece un final de ciclo que previsiblemente puede terminar siendo relativamente tranquilo, entonces. En los próximos meses está prevista la labor que habrá de desembocar en una reforma constitucional y el comienzo de la lenta búsqueda de un sucesor para Bouteflika, que continúe su línea política secular, su trayectoria y su labor.
Emilio Cárdenas es Abogado. Realizó sus estudios de postgrado en la Facultad de Derecho de la Universidad de Michigan y en las Universidades de Princeton y de California. Es profesor del Master de Economía y Ciencias Políticas y Vice Presidente de ESEADE.